¡Mamá! Soy un vampiro

David Rodriquez

Ser un vampiro no es tan espantoso y aterrador como piensas y con una imaginación activa, ¡es increíble cómo las tareas cotidianas pueden convertirse en algo fuera de este mundo! 

Esta historia entrañable y adorable tiene un gran final que hace que cualquier niño se sienta feliz de estar acostado en la cama en casa. 

Fantásticas ilustraciones de un artista muy buscado. 

Una historia atractiva que inteligentemente anima a los niños a usar su imaginación.